Iban en Alcántara, bajando, a Universidad de Chile, cuando se subió Marcos, lo saludaron y hablaron con él hasta que se bajó en Pedro de Valdivia, cuando Rodrigo dice:
-Si Marcos fuere un 1% más yegua, ni siquiera le hablaría.
Felipe, lo queda mirando con cara de rabia, la Vale al darse cuenta en tanto le dice:
-¡Ay! Rod que eres, ¿y cómo le hablas al Blabla?
-El Blabla no es yegua, por eso le hablo, y no me mires así hueon, sabes que a las yeguas no las paso.
Felipe lo miro con cara de “supieras”
-Además no sé qué le ponen tanto, ni que fuera la "princesa colores primaverales", le dan puro color nomas Uds.
La Vale largo a reír.
Ya en Salvador, el acumulo de gente era lo peor, un tumulto de gente sudada, sopeada, y demases, más las fallas del desodorante de moda de turno estaban aglutinando y poniendo pesado el aire más de la cuenta.
-Qué asco esta wea loco…
¡Baquedano al fin! Más del 50% del metro se bajó pero también subió su resto. Tomar el metro a la hora de almuerzo es en verdad lo peor.
-¿Y tú polola?
-No es mi polola…
-Pero pasan agarrando, algo son, ¿no?
-Siempre tan estructurada con eso Vale, no veo el ponerle nombre a la relación
-Soy mina ¿ya?
-¿Ya poh que onda? – dijo Felipe
-Agarramos nomas, nada serio.
-Y si te dice que quiere algo más
-No creo, la verdad no sé, no me interesa
-Como no te va a interesar además…
-¡Basta! Suficientes preguntas… ¿bajemos? - ya lo tenían chato con tantas preguntas por segundo, a Rodrigo siempre le cargó hablar de su vida, desde las pequeñas trancas con sus viejos hasta su “vida sentimental”
Subieron por las escaleras y tomaron la salida a Paseo Ahumada
Rodrigo siempre pensó que le apestaba esa escalera mecánica, sobre todo que al mirar hacia arriba había gente mirando para abajo, y topar miradas con desconocidos, sobre todo gente que le gusta pararse ahí, era lo peor.
Caminaron media cuadra cuando la Vale dijo:
-me acompañan al Euro quiero ver unas cosas – Rod de inmediato puso mala cara y obviamente Valentina se dio cuenta.
-No me mires así, entrar ahí no me gusta, y lo sabes de sobra.
-ya poh, si es para ver algo que quiero comprar más adelante.
-puta me apesta ese lugar, es un antro de púberes, pre púberes y teenegers con depresión endógena que no hallan nada mejor que refugiarse en lugares lúgubres y vestirse de negro a pesar de que hallan como 35º, además esos locos de las tiendas, puros guatones adictos al play y al pc, no sé qué vida es esa.
- qué bonita imagen tienes de mí...
-no, no, no me refería a ti…
-¿y tú tienes vida?
-claro, salgo cuando se me da la gana poh.
-no todo el mundo tiene tu plata Rod.
-mira cuando yo no tenía plata, pescaba mi bici y salía a pedalear por Santiago, llamaba a mis amigos del colegio, y les preguntaba si podía ir a sus casas, o que nos juntáramos y huevas, nunca me falto que hacer, en vez de estar encerrado en tu pieza mirando porno, o estar acostado mirando el techo y ver como tu juventud pasa por tus ojos y no hacer nada. – algo paso en esa última frase que el tono de voz de Rodrigo cambio.
Felipe atino a decir - yo te acompaño Vale. – y lo dejaron ahí, mirándose lo pies. Obviamente los acompaño, pero contra su voluntad entrar en un lugar donde todo el mundo viste de negro y estar vestido casi fosforescente, simplemente no pega.
Al salir, del Euro, las cosas se habían calmado. Pero Rodrigo seguía con esa angustia de estar en un lugar que no le gusta estar. Cuando más púber le gustaba venir al centro, lo encontraba la raja, pero después de ir creciendo se dio cuenta que el lugar mágico que era antes ahora, era un corredor de gente apurada sin respeto y un espacio mal oliente, sobre todo algunas esquinas como Puente con Catedral, en verdad Puente es en su extensión fétida, pensaba.
Bajaron un poco más, y Rod visualizo la famosa tienda de las deudas repactadas, entraron y pagaron la cuenta. En la entrada de nuevo Rodrigo dijo:
-gracias por acompañarme a hacer esta tontera, en verdad no tenían porque.
Se mezclaron entre la multitud y se perdieron en ella. El sol seguía dando fuerte en la ciudad, ir a tomarse un helado por ahí, era la siguiente parada.
Bueno esto no paso y fue algo que iba pensando cuando iba en el metro camino a Ahumada para pagar una cuenta hoy, y me vine recreando esta escena en mi cabeza, la verdad no se porque, pero así fue.